Crítica: DROWNING THE LIGHT – «Conquer or Serve (pentalogy)»

Este año 2025 comenzó de una manera increíble con el lanzamiento de no solo uno sino cinco álbumes de larga duración este mes de enero por parte de la banda australiana Drowning the light, la mente maestra de Azgorh nos complace con la inigualable saga Conquer or Serve que consta de cinco partes en formato CD, bajo su propio sello Dark Adversary Productions, actualmente están en pre-order en su página oficial pero el box-set edición especial limitado a 100 copias ya se encuentra sold out.

El ciclo del ouroboros comienza con Conquer or Serve I: From Primordial Waters of Chaos, mediante la solidificación atemporal de un cosmos que se encuentra dormido y abandonado, entre el orden y el caos, pero que despierta ante un nuevo amanecer con el poder de la Voluntad y la llama negra de la creación.

Un intro majestuoso en teclados, junto a la voz femenina, dulce y arcana de Strix (que lo acompañará a lo largo de estas obras) refleja las aguas primordiales del Caos: son aquello que ha superado las leyes de la naturaleza tal cual las conocemos, son creadoras de mundos, al igual que las vociferaciones desgarradoras del talentoso Azgorh, algo que siempre lo ha caracterizado como músico; aquí sus riffeos son melódicos, intensos y dramáticos, con una variación de emociones muy balanceada pues los acústicos son sencillos, pero contrastan a la perfección con la crudeza del trasfondo, la presencia de los teclados aparece en el momento justo creando una atmósfera que penetra en los sentimientos y explora las profundidades del abismo, sosteniendo las llaves para abrir las cerraduras de la vida, la muerte y la divinidad y convertirse en la entidad creadora más allá de las tempestuosas mareas.

No obstante, para crear, primero hay que comprender la propia conciencia como un ser aislado, y para eso, se debe estar atado a la propia carne, arraigado a la tierra y experimentar la condición humana y todo lo que está fuera de sí, a través de la lente de una entidad soberana en la naturaleza y así, poderse transformar verdaderamente en esas aguas primordiales.

Conquer or Serve II: The Natural Law Is Tooth & Claw es un álbum con un corazón salvaje, que describe que la naturaleza es cruel e implacable, puesto que no se preocupa por los sentimientos, deseos, esperanzas o inseguridades de los hombres. Tiene una armonía intransigente y si la humanidad existe o no es insignificante para los viejos dioses.

Este álbum es crudo y melancólico, con pasajes acústicos que se refleja no solo como una de las estaciones de la naturaleza, sino una estación de la existencia de la humanidad dentro de ella. Las distintas tonalidades de voz que emite Azgorh en este álbum son impresionantes, incluso cuenta con una dinámica muy intrigante y los cambios de la batería son fieles al old-school raw black metal, la incursión de flautas en uno de sus temas y sonidos ambientales son muy apropiados para la atmósfera que quiere transmitir.

De la misma manera, este álbum es una oda a la muerte como se puede apreciar en la portada, el lobo está desgarrando al inocente conejo, siendo la representación del cosmos reflejado a través de un acto de derramamiento de sangre microcósmico, por eso este álbum pertenece a ese lobo: ¿Eres la cabeza o la cola? ¿Sobrevivirás o caerás? ¿Conquistarás o servirás?

Sin embargo, a pesar de la belleza reflejada en este álbum, que cautiva y atrae, no hay que caer en el engaño, pues el mundo natural es un mundo de guerra, y su ley es de garras y dientes afilados… En palabras de Azgorh: “Y aunque la mayoría opta por no ver esto, el mundo de la humanidad y sus imperios y toda su «bondad» y «humanidad» está apenas velado y todavía existe bajo esa ley natural primordial, donde la espada desnuda sigue siendo hacedora o destructora de reyes. Y no importa cómo esté disfrazada por los poderes que se ciernen sobre ti, la espada ahora está en tu mente, la última y más importante tierra que ellos deben conquistar. De todos modos, esta especie caitiff ahora está en ruina, estamos en nuestro invierno y todos los imperios deben caer.”

Conquer or Serve III: Camelot in Flames no cuenta con un intro como los otros trabajos, sino que empieza directamente con la canción homónima del álbum, pero sí cuenta con un outro acústico que es la continuación de este primer tema, el cual habla sobre un gran rey filósofo conquistador (vale la pena recordar que según Platón, en su obra La república, argumenta que el mejor rey sería un experto en el arte de gobernar: un filósofo, pues es éticamente incorruptible, siendo el más virtuoso entre todos los demás) siendo este el arquetipo de un gran líder del que cada individuo tiene su propia versión en su mente, y con ello es que la decadencia de todos los grandes imperios comienza; porque todos tenemos una versión idealizada de la civilización, un Camelot, y todos estamos en la propia búsqueda esotérica del Grial.

Azgorth dice que “Aunque somos parte de la naturaleza, también tenemos la capacidad de alterar esas mismas leyes de la naturaleza, para crear aquello que nunca ocurriría naturalmente. Entonces desde el caos, en nuestra psique, soñamos con ese reino idealizado y tratamos de hacerlo realidad. Sin embargo, lamentablemente esto nunca se alineará con los demás, no importa cuán perfecto y hermoso sea el sueño, Camelot siempre terminará en llamas y el cuchillo siempre será hundido en tu espalda mientras intentas beber de ese grial… Una ambrosía que nunca podrá emborracharme en esta espiral mortal.”

La rapidez y contundencia del ritmo de este trabajo es notoria, se incrementa progresivamente la intensidad y hay un énfasis especial en los bombos de la batería, pero siempre manteniendo el enfoque en los riffeos eufóricos y las melodías rítmicas de las guitarras, el tema A Lone Knight Mourns His Kingdom es un entretiempo que refleja un viaje medieval en medio de una batalla, generando un sentimiento sombrío por el sintetizador. La atmósfera épica y la narrativa de la voz hace que la imaginación incurra en un paisaje sonoro que genera la visualización de la caída de un imperio, que curiosamente casi siempre llega mucho antes que las llamas lo consuman.

El hombre tiende a alejarse demasiado de la forma natural de existir en este mundo objetivo, y el precio final es la decadencia, y a medida que el tiempo pasa y las llamas se apagan sobre las ruinas de lo que alguna vez fue un gran imperio, surgirá uno nuevo, construido sobre las cenizas y los restos de la olvidada desaparición de su predecesor sólo para que la misma historia vuelva a repetirse, porque nuestro instinto primario como raza es el de guerra.

Ahora bien, todos los imperios se han alimentado con “remedios” que venden profetas venenosos, aquellos que tejen telarañas aterradoras y trágicas para que todos temamos a nuestros ataúdes, pero, temer a la muerte es convertirse en un esclavo, por lo que uno debe dejar a un lado la desesperación sobre ese hecho inminente, ya que no es el final cuando la noche cae sobre la vida.

Conquer or Serve IV: Xeperapep significa literalmente llegar a existir a través de algo que vino del caos (Apep es la serpiente del Caos) que originalmente no era parte del mundo natural, es un reflejo de la creación en sí misma, nunca existiendo antes u ocurriendo naturalmente, llegando a existir desde el caos hacia el cosmos. Estos cinco álbumes son un acto de Xeperapep que nos adentra en el vacío, hacia el grial. Las corrientes se fusionan y fluyen, desde las regiones tempestuosas acausales hasta la conjunción causal fluida del cosmos. Este es el nexo entre el pensamiento y la realidad: cuando se le arranca un ojo del dios halcón de la luz para conocer el mundo natural, mientras que Set conquista y se fusiona con Apophis (Apep) para traer el caos a la existencia y señalar este nuevo Eón.

La estrella de la mañana (Lucifer) cayó, para otorgar conocimiento a los sin cadena, y las llamas de los antiguos dioses fueron robadas para iluminar ese camino, mientras las entidades no corpóreas se derraman y se funden en forma de sombra, y más allá de las esferas de la marea de la oscuridad: Setapophis llega a la existencia, rompiendo el paradigma del pensamiento y abriendo ese portal al mar sin fin. Para entender que el hombre está aislado, que los parámetros son ilimitados pero definidos, y que los ciclos del destino están definidos, pero no determinados, así que es la voluntad quien dictamina si seguir el camino de los antiguos para conquistar.

Este álbum es majestuoso puesto que camina el umbral entre dos mundos. Cada canción de este álbum termina líricamente con la palabra «Xeperapep» para significar el acto de nacer sin haber existido previamente fuera del abismo. El rango vocal de Azgorh es variado y amplio en diversas tonalidades, no recuerdo haber escuchado tanto dinamismo en un mismo trabajo, transformándose incluso en una serpiente hechizante, pasando de profundos guturales a rasgados extremos e incluso voces más limpias que

literalmente me ponen los pelos de punta. A Song for Non-Corporeal Beings maneja una temática y ritmos egipcios, un viaje al caos mítico y misterioso.

“Traigo estas canciones a la existencia como un acto de creación y destrucción… También como una forma de verdadera magia negra. Uno que altera mi universo subjetivo… Y puede alterar el tuyo.” Dice Azgorh.

Finalmente, Conquer or Serve V: Setapophian Black Magick es donde el éter y el caos ahora se fusionan en uno, dimensiones arriba y horizontes abajo. Donde antes reinaba la sequía mental, ahora fluyen ríos de autoconocimiento, ya no estamos atados a una realidad que se estanca y decae, sino a una llama de sabiduría de ónix enrollada que muda su piel y revela su sombra. El demonio interno llama y se comunica con esa primera forma de conciencia aislada a medida que alcanza la Apoteosis.

Es un Black Metal inquietante y obsesionante, compuesto de hechizos sónicos, riffeos hipnóticos, cánticos gregorianos y teclados lóbregos, una percusión más cruda pero entusiasta, con una técnica precisa y platos estridentes, una variación de estados anímicos deslumbrantes ¡Un acto de magia negra Setapophiana centrado en sí misma! De la cual surgen de visiones abisales, que se cultivan y echan raíces, y cuando cierras los ojos, puedes sentir esas sombras moverse.

“¡Desde la Pirámide Negra, contempla el mundo que he creado! Y ahora que se nos concede el poder de crear… Volvemos en ciclo a aquellas aguas primordiales del caos… ¿Fue este el final o el comienzo del ciclo? Así es la paradoja de los ouroboros a medida que caemos en una disolución eterna.” Afirma Azgorh.

Y así como la serpiente se continuará mordiendo su cola eternamente, la última canción de este álbum Timeless Dissolve es una versión distorsionada de la primera canción Timeless Coagulation del álbum Conquer or Serve I.

En conclusión, cada uno de los álbumes destaca elementos claves que se han ido presenciado a lo largo de su discografía, la continuación de cada uno de los trabajos es armoniosa, por lo cual se me dificulta el hecho de tener que escoger un álbum favorito en particular dentro de esta pentalogía, ya que como se ha evidenciado, funcionan en conjunto y todos aportan un mismo cimiento condensado para esta grandiosa obra.

Es una aventura a la introspección, una manifestación de las artes negras, del misticismo y el Caos primordial, y aunque la llama primordial exista en la quinta dimensión o más allá, hay que enfocarse en el universo observable, pues la carne está adherida a las leyes naturales, y sin una consciencia de esto es imposible traspasar el velo, alcanzar la transmutación del alma y convertirse en un reflejo del espíritu en este mundo natural, el cual está atado por un ouroboros que siempre lo devora, siendo un acto de Xeperapep dentro de sí mismo. Ahora bien, estando en esta posición, se entiende que, siendo seres finitos la muerte es inminente, no hay razón por la cual temerle, pues esto solo evidencia sentimientos de fragilidad, debilidad o acobardamiento, los cuales deben ser desterrados para lograr la conquista y no ser meramente esclavos adoctrinados.

Soy fan de la banda hace varios años y procuro seguirle la pista muy de cerca y esta vez ha logrado impresionarme a causa de que nunca había visto ni escuchado algo como esto ¡Una obra inigualable! Considero que la producción de estos trabajos está muy bien hecha, pues es de muy buena calidad en cuanto se trata de raw black metal, adicionalmente, siempre he admirado la originalidad de Azgorh, no solo es un músico prolijo y de alto nivel, sino que tiene una habilidad tremenda en la composición de las letras de sus canciones, utiliza conceptos, elementos y temáticas poco usuales dentro del género, y las logra fusionar con una profunda devoción ocultista, y así ha creado un sólido sistema dentro del género, en definitiva, Black metal de alta calidad, limitado y underground NO TRENDS en todo el sentido de la palabra.